Entre el 26 de julio y el 11 de agosto se celebran en París, Francia, los Juegos de la XXXIII Olimpiada, el principal evento multideportivo internacional. En este contexto, aparece como protagonista la madera.
Junto al ahorro energético, la madera es el estandarte que levanta la organización de los Juegos Olímpicos París 2024 como mensaje para el cuidado del ambiente y los recursos naturales, la lucha contra el cambio climático y el desarrollo de la bioeconomía.
Los Juegos Olímpicos históricamente fomentaron la construcción de sedes espectaculares, pero cuya construcción genera importantes emisiones de CO2. En comparación con anteriores ciudades anfitrionas, París construyó muy poco y se propuso como meta limitar considerablemente su huella de carbono. En esta dirección, la organización hizo hincapié en los materiales sostenibles, con un uso masivo de la madera.
París presenta al mundo dos proyectos emblemáticos: la Villa Olímpica y el espectacular Centro Acuático (foto de tapa). En las demás instalaciones deportivas, la madera se luce a la vista y en soluciones arquitectónicas de alto vuelo. La Empresa Ejecutora de Obras Olímpicas (SOLIDEO), dependiente del Estado, fue la responsable del desarrollo de los sitios olímpicos y paralímpicos como parte de un proyecto urbano sostenible. Contó con el apoyo del Centro Científico y Técnico de la Construcción (CSTB) para hacer cumplir estándares que contribuyan a una mejor calidad en los productos y procesos industriales asociados a la edificación con madera. Las acciones llevadas a cabo por SOLIDEO y CSTB se tradujo en la provisión de diversas guías de diseño relativas a sistemas constructivos y de desarrollo de productos de madera.
La construcción en madera está en alza en Francia, impulsada por la normativa RE2020 sobre edificios nuevos que entró en vigor en enero de 2022. La normativa establece requisitos para reducir las emisiones de carbono y mejorar su eficiencia energética. Con el impulso de los Juegos Olímpicos, el sector de la madera espera que la visibilidad de los edificios olímpicos de madera ayude a promover y crear una imagen positiva en torno a la construcción con madera.
Villa Olímpica sustentable y reutilizable
La Villa Olímpica de París 2024 fue concebida como un complejo inmobiliario destinado a albergar cerca de 15.600 atletas, que se transformará, una vez finalizados los Juegos, en un verdadero distrito urbano diseñado para los habitantes de Saint-Ouen-sur-Seine y de Plaine Commune, su lugar de emplazamiento.
La construcción global de la Villa Olímpica incluye un diseño bioclimático de los edificios; doble orientación, juego de alturas entre los distintos edificios para maximizar la insolación, balcones en fachada que actúan como parasoles, etc. También cuenta con un bosque urbano de 3.000 m2 que genera una isla de frescura y biodiversidad, ampliado por jardines en las azoteas que contribuyen a la lucha contra las islas de calor.
Baja en carbono por el uso intensivo de madera o mezcla de madera/hormigón bajo en carbono, la Villa Olímpica utiliza madera de bosques gestionados de forma sostenible y certificados PEFC o FSC. La obra es ejemplar en términos de eficiencia energética (etiquetas BiodiverCity y E+ C- / E3 C2 para viviendas R+6 / E3 C1 para viviendas R+9 / E2 C1 para oficinas). Incluye soluciones innovadoras de producción de energía basadas en fotovoltaica in situ. Uno de los edificios (Cycle 8) fue ideadao como piloto en la implementación de nuevas soluciones de circuito corto para agua y biorresiduos.
La Villa Olímpica tiene construida en madera una cuarta parte de su superficie cubierta y casi la totalidad de las estructuras de los edificios que la componen. Todos los edificios de menos de ocho pisos fueron edificados en madera y los demás de materiales mixtos, incluida la madera. También es el caso del Centro Acuático Olímpico (ver página 12), la obra emblemática de los Juegos, cuyo armazón y esqueleto son totalmente de madera.
La edificación está parcelada en cuatro “lotes”, de los cuales uno (Lot D) contempla construcciones 100% en madera. El Lot D tiene una superficie de 48.250 m2 y se compone de 13 edificios con ubicación para 3.000 atletas. En la fase posterior a los JJ.OO. se reconvertirá en el emprendimiento inmobiliario “Les Quinconces” que incluirá más de 600 unidades habitacionales: 241 viviendas para compra; 95 viviendas familiares de alquiler social; 100 viviendas de alquiler intermedio; una residencia social dirigida principalmente a personas con discapacidad; una residencia de estudiantes.
Cerca de 3.000 m2 de espacios quedarán abiertos al público en la planta baja para amenizar la vida del barrio y satisfacer las expectativas de los vecinos: Club Social Sport, con 1.300 m2 dedicados al deporte, la cultura y la gastronomía; 400 m2 de estudios de danza; Ecolab, una conserjería vecinal de 300 m2 dedicada a enseñar sobre la transición ecológica y apoyar a los vecinos en acciones eco-responsables; The Images hub, 200 m2 de coworking centrados en los nuevos medios y las profesiones de la imagen; 350 m2 dedicados a servicios locales (guardería y pequeños comercios); y Les Gradins, 9.300 m2 de oficinas, diseñadas para adaptarse a métodos de trabajo colaborativos y flexibles.
Los Lot A y B Universeine tienen edificios construidos en estructura y/o fachada de madera y hormigón bajo en carbono. Cumplen con una huella de carbono un 40% menor que la de los edificios convencionales. En total suman 108.990 m2 de superficie construida.
El proyecto Universeine contempla una ejecución en dos fases. Una primera fase Juegos Olímpicos con una entrega de viviendas realizada en marzo de este año; y una segunda fase HER (Heritage) posterior a los Juegos que prevé la transformación de estos alojamientos en oficinas en un plazo de 10 meses. El diseño es muy ambicioso en términos de reversibilidad, en particular en lo que hace a normativa contra incendios y acústica.
El proyecto se divide en dos bloques principales. En ambos, la mayoría de los edificios se diseñaron con estructuras de madera y hormigón bajo en carbono. Las fachadas también son mayoritariamente FOB (Wood Frame Façade), con carpintería mixta de madera y aluminio.
La devolución de las obras por parte del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos está prevista para noviembre 2024. Entre junio de 2025 y abril de 2026 se hará entrega a los compradores e inversores de los trabajos de conversión de las unidades.
Finalmente, el Lot E, de 52.000 m2 de superficie construida, incluyó un 80% de madera de abeto laminada estructural francesa y 20% LVL en haya alemana, para los 13 edificios (de un total de 19) en estructura de madera. El proyecto tiene un gran desarrollo sostenible y de reconversión: 40.000 m2 se dedicarán a vivienda, 13.000 m2 a oficinas y unos 5.000 m2 a comercios y actividades locales. Uno de los contratistas -especialista en la construcción con madera- suministró 20.000 m2 de paredes con entramado de madera. El 90% de la madera tiene certificación FSC o PEFC. Las fachadas son mixtas de madera y aluminio en el edificio de oficinas.
El proyecto se propuso alcanzar un alto índice de confort térmico: el desempeño energético logra bajar 6°C la temperatura exterior de 32°C o más. Otro desafío fue lograr un récord de construcción con bajas emisiones de carbono: límite de 700 kg/m2. Se eligieron tres métodos de construcción: con hormigón bajo en carbono; una mezcla de postes y vigas de madera, hormigón bajo en carbono y FOB (fachadas con estructura de madera); y una mezcla de postes de vigas de madera/hormigón con bajo contenido de carbono y MOB (paredes con estructura de madera). Además, el diseño también deja mucho espacio a la vegetación para aumentar la biodiversidad y combatir activamente las islas de calor urbanas y anticipar el cambio climático. También se puso énfasis en la reutilización de materiales provenientes de excedentes de obra o de deconstrucción. Pero la reutilización no se limita a la fase de construcción. Casi el 75% de los materiales utilizados en la fase de “Juegos” serán desmantelados y reutilizados durante la fase de “legado”.
El Centro Acuático Olímpico como emblema del potencial de la madera en grandes obras
El CAO es la nueva obra más importante para los Juegos de París. Está diseñado como una caja de madera suspendida en el cielo, basado en principios innovadores de ecoconstrucción. El proyecto genera una cubierta cóncava, extensible, lisa y de aspecto ligero que soporta una superficie de paneles fotovoltaicos (unos 5.000 m2). Tiene una estructura de pabellón deportivo de madera con fachadas de vidrio revestidas con parasoles exteriores de madera. El conjunto descansa sobre una base de hormigón. Sus dimensiones alcanzan los 30 x 106 x 114 m.
La madera está en el corazón del proyecto, al que aporta su identidad y cálida atmósfera. Tomada como hilo conductor, la madera permitió resolver limitaciones energéticas y estructurales, estéticas y acústicas. Un diseño arquitectónico basado en un sistema constructivo sencillo y ligero permitió reducir la huella del edificio. Al mismo tiempo, ofrece como distintivo una cubierta con una luz de 90 m, única en el mundo.
Su estructura de madera y el uso de materiales de origen biológico y reciclado, colaboran con la mínima huella de CO2 y la reversibilidad y reutilización a largo plazo. El 85% de la energía consumida procede de energías renovables o recuperadas; se recupera el 50% del agua utilizada o se reutiliza hasta el 40%; los 3.000 asientos fijos fueron fabricadas con plástico 100% reciclado, a partir de tapones de botellas recolectados localmente, mientras que los 3.000 asientos en bruto de las gradas adicionales destinadas específicamente a las competiciones internacionales son elementos temporales y reutilizables.
Así, el CAO emerge como una escultura dominada por la madera en el paisaje urbano. Luego de los Juegos será la referencia de un parque verde abierto al público y conectado con el estadio deportivo más grande de Francia mediante una elegante pasarela cubierta de vegetación.
Monumento de madera
El Gran Palais Epemeral de París es un edificio monumental con estructura de madera, con una superficie cubierta de 10.000 m2. Su estructura está formada por 44 pórticos de laminado encolado de 20 metros de altura que forman una cruz. Dos naves se cruzan en un valle central formado por 2 pórticos de 65 metros de luz. Con 150 metros de largo, la nave principal compuesta por dos alas de 12 pórticos de 50 metros cada una está construida como una extensión de la plaza externa en la que se asienta. La otra nave, de 130 metros de longitud como prolongación del exterior abierto, tiene 3 pórticos de 30 metros hacia un lado y otros 15 para la otra ala.
Algunas cifras clave de proyecto:
– 1.700 m3 de madera laminada encolada.
– 130 toneladas de herrajes para ensamblar diferentes piezas de madera.
– 2.000 horas de prefabricación de elementos de madera.
– 5.500 horas de montaje en obra.
– 38 convoyes excepcionales para transportar piezas al sitio.
En la fábrica de uno de los contratistas se prefabricaron arcos estructurales con una luz libre de 35 a 67 m, cuyo montaje se realizó en pocas semanas, lo que hizo posible completar el proyecto en un tiempo récord.
Una pasarela de alta tecnología constructiva
La Pasarela sobre la autopista A1 permite conectar dos sectores claves de la metrópoli parisina durante los Juegos, pero fundamentalmente implica una reconversión urbana de dos zonas de la ciudad que se encontraban aisladas por el tránsito.
La Pasarela A1 queda reservada exclusivamente a peatones y bicicletas. Los únicos vehículos motorizados que podrán circular por allí serán los vehículos de emergencia y salvamento.
Inaugurada a comienzos de este año, la estructura de este cruce fue realizada con 400 m3 de en pino Douglas francés, madera procedente de bosques locales gestionados de forma sostenible. El deck fue diseñado y construido en formato mixto madera-hormigón para mayor durabilidad de la estructura. El laminado encolado tipo bloque usado en la estructura garantiza una mejor estabilidad al fuego.
Ecobarrio a escala humana
El Ecodistrito fluvial Lot C acoge parte de la Villa Olímpica y Paralímpica, respondiendo a exigencias de reutilización pos Juegos: precios limitados de la vivienda, diversidad social, diversidad arquitectónica y requerimientos medioambientales. En total son 46.800 m2 de superficie, con edificios 100% pasivos que contienen 2.900 m2 de paneles fotovoltaicos.
El Ecodistrito tiene el macrolote PB que presenta la mayor diversidad de tipologías habitacionales: desde viviendas colectivas hasta viviendas intermedias. La madera tiene una fuerte presencia estructural.
Las fachadas identifican el ambiente del barrio a partir de colores cálidos, con el uso de madera y cal. Una plaza pública se plantea como punto de reunión para atletas y futuros vecinos en un eje convergente de los edificios.