“El potencial argentino es altísimo. Chile tiene una industria potente. Uruguay la desarrolló en 15 años. Brasil en los últimos 50 años. No hay razón para que Argentina no tenga una industria de alto nivel, muy productiva y muy moderna. Exportadora y sustentable. Lleva mucho trabajo pero hay que debatir y ver cómo se puede hacer una industria responsable y que sea vista así por el mercado”.